En Autoescuela Marcos (autoescuela en Gandía) les enseñamos a nuestros alumnos la importancia de una conducción segura. Hacemos mucho hincapié sobre el uso del cinturón, que el vehículo esté en buenas condiciones, tomar una posición ergonómica adecuada, respetar las normas de tráfico, dormir y comer lo suficiente, no conducir si se han ingerido bebidas alcohólicas u otras sustancias… Pero también es importante que sean conscientes de otras situaciones que pueden suceder día a día. Situaciones muy comunes como la alergia.
Para muchos, la llegada de la primavera no solamente supone la subida de temperaturas, disfrutar de más horas de luz, salir a la calle, llenar terrazas… Es una estación que es sinónimo de alergia y puede convertir una maravillosa primavera en una auténtica pesadilla.
Conjuntivitis, picor en la nariz, en la garganta, en el paladar, congestión nasal y estornudos y/o dificultad para respirar, tos y pitidos. Si estos síntomas desaparecen cuando llueve y vuelven y empeoran con el viento, es alergia. Pero lo recomendable es acudir al médico.
De abril a mayo, e incluso a veces junio, se produce la mayor incidencia de las enfermedades alérgicas. Conviene no automedicarse y seguir el tratamiento del médico. Pero, ¿sabías que la alergia afecta a la conducción?
¿Cómo afecta a la conducción? – Autoescuela en Gandía
- Lagrimeo, congestión nasal, fatiga, estornudos en cadena… esos síntomas ya pueden dificultar la conducción segura. De hecho, al encadenar estornudos sin parar, perdemos hasta 15 segundos la atención de la carretera.
- Muchos de los alérgicos sufren alteraciones en el sueño. La congestión nasal no les deja dormir y descansar bien por las noches.
- Los efectos secundarios de los fármacos utilizados en el tratamiento, también pueden afectar a la conducción segura. Si nos estamos automedicando, podemos estar tomando algo inadecuado para nuestra alergia y no somos conscientes de sus efectos secundarios e interacciones con otros medicamentos o sustancias. Lo mejor en estos casos es comprobar el prospecto, ver si tiene efectos sobre la conducción y seguir las instrucciones. Y en el caso que consultemos a un especialista, lo mejor es indicarle que vamos a conducir para que nos recete un medicamento que no tenga efectos secundarios o que no tenga influencia sobre la conducción.
Ahora que lo sabes, mucho cuidado al volante.